El cementerio

-No, la verdad es que no importa -Le dije sonriendo
dulcemente.
Noté su dulce beso, aquellos besos me gustaban tanto...

Se separó de mí y no pude evitar
apenarme un poco, aunque ahora mismo
seguíamos estando juntos.
-¿Quieres que hagamos algo? -Le dije sonriendo.

-Vale -Le dije sonriendo.
-Vallamos a tomar un helado(XD) -Lo cogí de la mano
y salí de allí.

Llegué al cementerio y me encontré a una vampiresa
-Hola- le dije

Vuelvo al cementerio, me siento en una derrumbada tumba y bostezo con aburrimiento.
-Hola -Saludo a los presentes.
<Me dejaste tirada> le dije mentalmente a Kyrd.

Bostecé aburrida.
<Ya es hora de que me digas que te ha pasado> le exigí mentalmente.

Aparecí al lado del que había sido mi hermano y con una rapidez sorprendente, lancé mi mano hacia su rostro, causando un gran sonido al tocarlo.
-No has vuelto -Grité furiosa. -Tú no eres el Kyrd al que queremos, tú eres un completo desconocido para nosotras -Seguí diciendo mientras se me saltaban las lágrimas de la rabia.

Me quedé quieta como una estatua cuando setí como me abazaba. Una lágrima rodó por mi mejilla con lentitud, mojándola.
Rápidamente correspondí a su abrazo y me quedé quieta un momento mientras lo escuchaba decir aquello.
-El Kyrd de ahora es insoportable -Le dije mientras lo miraba fijamente.

Me encogí de hombros.
-Me gustan los problemas -Dije mientras me seaba las lágrimas.

Me puse triste de repene, al ver que le dolía que Eyre y Deloys no le saludaran.
Creí escuchar un leve murmullo que emanaba de sus labios, fue algo como un saludo. Deseé que hubiese pasado de verdad.

Las miré con furia, con odio.
Corrí hacia mi hermano y me fui con él.

Sali de alli

La figura de Francis hizo acto de presencia por sobre el porton negro del cementerio que daba inicio a un mar de lapidas interminable.
Levantando una mano y colocandola dentro su chaqueta saco unas cinco rosas blancas y las coloco junto a una tumba con el siguiente epitafio.
"Rose de Drake"
Sin poder controlarse, una lagrima cruzo su rostro mientras su perro dormitaba junto a un arbol cercano.
"Han pasado muchos años desde tu muerte..." Pensó mientras limpiaba con el mismo pañuelo ensangrentado sus lagrimas dejando algun rastro de sangre seca en su rostro.
Luego de esto permanecio en cuncliyas observando un pequeño marco dorado con la foto de su amada.